Fiscalía acusada de difamar a abogada fallecida
Valeria Pérez trabajó durante 7 años en el Ministerio Público, destacándose por las asignaciones que se le encomendaban, incluso en una oportunidad por el propio fiscal nacional Jorge Abbott. Asimismo, el fiscal regional le encargó diligencias tan delicadas, como tomar declaraciones en causas de violencia rural y terrorismo en la Macrozona Sur, según contó su amiga Camila Retamal.
Sin embargo, luego de apoyar la denuncia de otra funcionaria en contra de la administradora de la fiscalía de Traiguén, fue desvinculada sin previo aviso y con efecto inmediato el 4 de noviembre pasado; sin que se esperara siquiera el término del año. A los dos días ingresó al hospital de Victoria, donde entró en coma y luego falleció.
"Por la evaluación que se realiza de los funcionarios que prestan servicios a honorarios, se había determinado que su rendimiento, vinculado evidentemente con su condición de salud, no era el que correspondía y se le notificó la desvinculación el día antes de que fuera hospitalizada", dijo el fiscal regional Roberto Garrido para justificar su decisión de despedirla.
Además, parte de sus enfermedades fueron producto de su propio trabajo. Su amiga Camila Retamal defendió con valentía la imagen de Valeria Pérez.
"Que impotencia ver estas declaraciones del Fiscal Regional... a la Valeria que jamás tuvo un mal desempeño", manifestó Camila.
"Tienen el descaro... cuando más vulnerable estaba...", agregó su amiga.
"La Vale no está físicamente... ensucien su nombre", puntualizó Camila Retamal.
Por su parte Adolfo Carrasco comentó sobre el acoso laboral del cual fue víctima Valeria: "Valeria no tenía tiempo ni para ver a su familia...".
Carrasco ratificó además que ni Valeria ni su familia recibieron apoyo por parte de la fiscalía. "No estuviste presente...", puntualizó.
Hasta el momento, la fiscalía regional no se ha vuelto a referir al tema. La Asociación de Funcionarios del Ministerio Público ya solicitando antecedentes sobre Valeria Pérez.